Expresó que en esta primera etapa de evaluación participaron 654 profesores de educación básica, 320 de educación media superior y 146 aspirantes a cargos directivos y de supervisión, con una asistencia de más de 99 por ciento en los cinco fines de semana que duró el ejercicio.
Puntualizó que hay muchos mitos alrededor de la evaluación docente, pero el objetivo principal es identificar las debilidades del sistema educativo estatal y buscar el mejoramiento, mientras que los profesores tienen la oportunidad de entrar al nuevo programa de incentivos económicos.
Consideró que la actual evaluación en el sistema educativo nacional dejará grandes beneficios porque al identificar las deficiencias de los profesores se les podrá capacitar en aquello que requieran específicamente.
Explicó que a los profesores que salgan mal en alguna materia se les apoyará con cursos para que se superen y puedan someterse a una segunda evaluación y hasta una tercera, después de la cual “no pierden su trabajo” como se ha dicho, sino que son cambiados de función dentro del sistema educativo.
La evaluación no tiene el propósito de despedir a los profesores, sino de que mejoren en aquello que les hace falta y no de que tomen cualquier curso para avanzar en la carrera magisterial, puntualizó.





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