Donald Trump, el cácaro de Hillary Clinton

Donald Trump

Por M.C. José Isidoro Peredo

Si Nicolás Maquiavelo no hubiera nacido en Florencia Italia en el siglo 14 seguramente habría nacido en Estados Unidos en el siglo XX y de seguro abríase encumbrado como uno de los mejores consejeros del poder económico y político de ese país, ¿o cómo cree usted que USA entro a la segunda guerra mundial? Ya en medio de la trifulca y con negociaciones por debajo del agua.

El imperio japonés se preparaba para entrar al conflicto invadiendo China como conducto para llegar a Rusia y   cerrar la pinza conjuntamente con los Nazis  contra el comunismo, pero ya en esas el gobierno americano pretendía entrar a los guamazos y así poder tomar una tajada del pastel, sólo que el pueblo norteamericano no deseaba y no aceptaría la entrada de su país a otra conflagración europea como la de la primera guerra que costó millones de vida ¿entonces cómo hacerle?

Pues fácil, el contraespionaje gabacho infiltrado hasta el tuétano en el imperio de Hiroito les hizo ver que era más redituable para ellos, los nipones,  apoderarse de los archipiélagos del Pacífico y llegar hasta los mismos EU. Los japoneses se lo creyeron a pie puntillas, ilusos se imaginaron que el gran océano estaba allí como un pequeño mar interior en el que podían andar como peces en el agua moviendo su magnífica armada, entonces implementaron su campaña TORA TORA TORA cuando se les informo “secretamente” que la flota gringa estaría lista y puesta en Pearl Harbor para ser destruida, y vámonos que llegan y a darle, pero los buques más importantes y estratégicos no estaban allí ese día cuando se supone que allí deberían de estar.

Al día siguiente el pueblo Norteamericano pedía a gritos la entrada de EU a la guerra, bueno y  más recientemente en la época contemporánea con las torres gemelas, con todo el conocimiento de lo que estaba por venir y con negociaciones por abajo del agua con grupos opositores a Saddam se preparó por ambos lados la destrucción de las torres gemelas, hoy se sabe a ciencia cierta que ambas torres fueron preparadas por expertos en demolición que sembraron los explosivos conocidos como termita y que conjuntamente con los impactos de los aviones comerciales dieron abajo con los emblemáticos edificios, los EU justificaron así la invasión y empoderamiento de Irak y su petróleo.

Hoy por hoy esos aprendizajes y métodos políticos se llevan a otro nivel más “light” en el proceso de elección presidencial de los EU ante un pueblo desilusionado de su clase política y ante la enorme necesidad de impulsar la imagen de quien será la primera presidenta de esa gran nación, en los Estados Unidos aunque no lo crea usted los puestos políticos se han otorgado sólo a los hombres del poder una especie de machismo sagrado, lo que haría sumamente complicada la aceptación de Hillary Clinton más aun ante el peso de los desvaríos de su marido como “ tiranosauro sex” .

Entonces aquí entra el maquiavelismo del que hablamos, se infiltra al interior del partido conservador la idea convincente y conveniente de que un gran empresario podría darle un nuevo sentido de unidad a la nación y se van por el señor  Donald Trump hombre que se ha desarrollado bien en los medios, escritor, con carisma, lana y muchos talentos para convencer, pero de quien se conoce su sed por el protagonismo, y su baja experiencia en el manejo político, ante tal situación y como hipótesis, se da que lo encumbran inflando los votos a su favor al interior de las votaciones internas, seguramente en ese ínterin es cuando ya se negocia su papel de cácaro de Hillary o quizás desde antes.

¿Cómo poder hacer que la votación a favor de Hillary sea apabullante sin dejar lugar a dudas de la gran preferencia de los votantes por ella? ¿Cómo hacer que las minorías que normalmente poco acuden a votar voten? ¿Los afroamericanos, latinos, mexicanos, chinos, japoneses, rusos, italianos, irlandeses?

Pues acosándolos con amenazas de deportación, de puño fuerte, de más impuestos y a los mexican curios, que son más de 20 millones, pues con la amenaza de deportación, levantamiento del muro, mano firme a los ilegales y hasta la caza legal de los que cruzan sus fronteras.

Es claro que todos ellos irán en contra de este señor, pero ¿son todos, y son mayoría? No. Nones, nel hace falta ahora desmitificar al gran líder mediante sus intervenciones en los debates, así se irá cerrando su autodestrucción para que su imagen mengue y la de Hillary se fortalezca, hablar mal de las mujeres en general, dejar ver que es un tracalero evasor de impuestos volver a arremeter contra los mexicanos y latinos, ¿le favorece? ¿Es posible que un hombre de tanto éxito sea tan pequeñito en su pensamiento político? No, no y no.

Para Hillary ese candidato significa la mesa puesta con utensilios de oro y plata, llegará con una enorme votación, de prácticamente todos los sectores sociales, para los latinos significa estabilidad y de seguro ella ya en el poder podrá establecer medidas radicales “salvadoras” que evitarán la deportación de millones pero que regularán a toda fuerza la entrada de trabajadores bajo el estatuto de legales temporales, y así también encumbrara en los puestos y políticas públicas a las minorías incluyendo por supuesto a los nuevos tipos de género.

Llegar así con una gran votación fortalecerá grandemente su imagen y poder ante su pueblo y el mundo, Hillary  es y será un tanto cuanto como la mujer de hierro de los ingleses pero más, mucho más fuerte, más firme, más poderosa, y el mundo va a temblar con los cambios que se avecinan ante tal personalidad inteligente, dura e inflexible. ¡Pobre México tan lejos de Dios y tan cerca de los EU!